Los más de 300 mil maestros de la educación pública y los funcionarios de las distintas entidades del Estado, dieron hoy otra “vuelta de tuerca” a la presión al Gobierno para que no dilate más la negociación con los sindicatos estatales y atienda las solicitudes del magisterio, que hoy cumple 12 días de paro y tiene sin clases a 8 millones de estudiantes en todo el país.
Esta segunda movilización y paro estatal tuvo prácticamente las mismas características del registrado el martes de la semana anterior. Esto es, fue una jornada multitudinaria y pacífica, en la que 600 mil empleados de las diferentes entidades del estado paralizaron labores, y unos 200 mil salieron a las calles de Bogotá y las principales ciudades del país para manifestar su inconformidad por el tratamiento que el Gobierno les ha dado a sus reclamos.
Puedes leer: “El balón ahora está en la cancha del Gobierno”, dice Fecode. El paro nacional entra en su segunda semana
Al cese de labores en el magisterio, el Ministerio de Trabajos y el ICFB, donde el paro es indefinido, se sumaron en paro de 24 horas los empleados de la rama judicial, el SENA, la DIAN, Notariado y Registro y el Inpec, donde desde hace dos semanas los guardianes adelantan lo que llaman “operación reglamento”.
En la movilización de hoy también participaron padres de familia solidarios con la causa de los maestros, y organizaciones de estudiantes de las universidades públicas del país, en apoyo a la protesta de los trabajadores estatales y para exigir mayor financiación a la educación superior. En Bogotá marcharon estudiantes de las universidades Nacional, Distrital y Pedagógica, y los estudiantes del SENA.
También te puede interesar: “En casa de herrero, azadón de palo”: paro en Min-Trabajo por incumplimiento de acuerdos laborales
Para Fabio Arias, Secretario de la CUT, el paro se cumplió dentro de las expectativas que se tenían, y en ese sentido fue exitoso, igual e incluso mejor que el de la semana pasada. Lo que sigue demostrando la inconformidad de los trabajadores estatales, señaló.
“Fue también una jornada de solidaridad con los paros cívicos de las comunidades del Chocó, Tumaco y Buenaventura, pueblos olvidados y desfavorecidos por el Estado y el empresariado. Nadie sabe qué se hace con la riqueza que produce Buenaventura. Allí el Estado no invierte y los empresarios solo ven al puerto como un lugar para entrar y sacar mercancías, no para hacer inversión social”, agregó el directivo de la CUT.
Asimismo, llamó la atención del Gobierno para que escuche el clamor de la calle y cambie la dinámica de las negociaciones con los sindicatos estatales. “No puede seguir con el argumento reiterativo de que el país tiene graves dificultades fiscales y tributarias y por eso no hay plata para los trabajadores del Estado, como para que nos pongamos a llorar con él”, comentó Fabio Arias.
Contrastó esa posición del Gobierno con el anuncio de estímulos para la reactivación económica de los empresarios. “No nos oponemos a esos estímulos, pero no pueden hacerse sobre la base de que a los trabajadores no se les da nada. O sea que pagamos los platos que ellos mismos han roto”, agregó.
Te puede interesar: Gran movilización del sindicalismo estatal en Bogotá y el país, como hace rato no se veía
Por su parte Miguel Morantes, presidente de la CTC, central que aglutina varios sindicatos estatales, dio también parte de éxito en la jornada. “Hay suficientes motivos para salir a protestar, y la gente respondió. Hay mucho desánimo por la actitud dilatoria del gobierno, pero a la vez mucho ánimo para luchar y llamar la atención para que los problemas se resuelvan”, dijo.
El show mediático de la Ministra
Desde el 11 de mayo, cuando el paro del magisterio empezó, Fecode ha realizado varias sesiones de trabajo con la Ministra de Educación, Yaneth Giha, y los Viceministros de Educación y Hacienda. Sin mayores avances porque las propuestas en torno al capítulo económico del pliego presentado por Fecode han sido “tibias”, no resuelven ni responden a las aspiraciones de los maestros.
“Bajo la mampara de la crisis económica que vive el país, este Gobierno pretende que los educadores y la educación pública se sigan sacrificando y aplacen sus exigencias, como si fuesen los propiciadores o culpables de tales dificultades”, señaló Fecode en un comunicado, en el que también da cuenta de la firmeza y unión de los maestros en torno al Paro Nacional.
En el comunicado insta a los maestros a acatar sólo las orientaciones oficiales de los sindicatos filiales y de Fecode, y no dejarse intimidar por las declaraciones y decisiones del Ministerio de Educación o las Secretarías de Educación. Asimismo, los anima a seguir desarrollando las tareas programadas y prepararse para acciones de mayor calado en defensa de la educación pública y de los derechos laborales de los educadores.
“No hay ninguna respuesta a nuestro pliego de peticiones. La Ministra de Educación sigue en su show mediático de ir a Fecode para decirle a la opinión pública que está dispuesta a negociar. Pero una cosa es lo que ella dice y otra es la realidad de lo que está pasando en la mesa, donde se quedó en el disco rayado de que no hay plata”, señaló al respecto William Agudelo Sedano, presidente de ADE, el sindicato de maestros de Bogotá.
Puedes leer: Se agita la protesta laboral en Colombia: paros en magisterio, Min-trabajo, ICBF y taxistas. Informe especial.
Al final de la tarde de hoy se reunirán los dirigentes de los sindicatos y federaciones estatales, incluido Fecode, para hacer una evaluación de la jornada y proyectar las acciones a seguir, que serán en la línea de endurecer su posición frente a la falta de voluntad política del Gobierno para atender los reclamos del magisterio y los empleados estatales; y en la perspectiva de un posible paro cívico nacional.
Asimismo, para mañana miércoles está programada una marcha de los indígenas agrupados en ONIC, desde Popayán hasta Cali; y para el 1° de junio está convocada una gran movilización nacional por la implementación de los Acuerdos de Paz.
Por otra parte, se acerca la Conferencia Anual de la OIT, la primera semana de junio, a la cual el gobierno colombiano, de no solucionar la problemática laboral en el magisterio y en las entidades estatales, le tocaría asistir en medio de un paro nacional, lo cual no sería de muy buena presentación.