La minería es uno de los 5 sectores priorizados por el Plan de Acción Laboral, PAL firmado en 2011 por los gobiernos de Colombia Y estados Unidos. En aquel entonces y para que el Senado estadounidense pudiera aprobar el Tratado de Libre Comercio, se firmó el PAL que tenía acciones para mejorar las condiciones de los trabajadores colombianos.
Además de la minería, también hacen parte de los sectores priorizados la caña de azúcar, la palma de aceite, las flores y los puertos.
El pasado 7 de abril se conmemoró un aniversario más de la firma del PAL y por eso desde la Agencia de Información Laboral estamos presentando una serie de entrevistas con sindicalistas y activistas de los 5 sectores. El turno el día de hoy es para Igor Díaz, el presidente de Sintracarbón, organización sindical que hace presencia en la Costa norte colombiana en las empresas que se dedican principalmente a la minería del carbón.
En la siguiente entrevista, Igor nos cuenta que ha pasado en la minería en estos últimos diez años, como ha sido el tema de la tercerización laboral, la discriminación sindical y la negociación colectiva.
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¿Cómo ha cambiado la regulación laboral en Colombia en los últimos 10 años?
Cuando uno revisa la legislación colombiana encuentra que hay una jurisprudencia, que, de una u otra forma, por efecto de las luchas que han dado los trabajadores, han generado alguna favorabilidad. Hay un hecho en una sentencia que tiene que ver con una favorabilidad de los trabajadores. Antes las huelgas eran estigmatizadas y solo había la huelga aquella que era generada por un conflicto laboral ante la presentación de un pliego de peticiones, pero hubo un fallo de la Corte, ante el reclamo de unos trabajadores de un hospital en Maicao, que generó posibilidades de hacer unas huelgas mucho más allá de lo que es una huelga generada por un conflicto laboral. Eso le da a uno la perspectiva de que ha habido, en los últimos años, algunos cambios en materia de legislación laboral en Colombia. Pero también es necesario decir que se han planteado algunos criterios, desde el punto de vista legal, que han restringido beneficios de los trabajadores, por ejemplo, el caso de Avianca, son decisiones de jueces de la Republica que han permitido cercenar derechos de los trabajadores. Hay de cal y de arena.
Las centrales de los trabajadores en Colombia debemos seguir trabajando para hacer influencia que permita moldear la legislación colombiana a favor, porque definitivamente hay una mayoría dominante en el congreso, a favor del gobierno y de la cual nada surgiría a favor de los trabajadores. Eso lo planteo para decir que las luchas hay que mantenerlas y hay que avanzar, para que, desde el punto de vista de la jurisprudencia se favorezca a las y los trabajadores.
¿Cómo era la presencia de las Cooperativas de Trabajo Asociado en el pasado y cómo ha cambiado la situación en los últimos 10 años?
Esa era una medida recurrente por parte de los empresarios. Afortunadamente eso ha cambiado, hoy casi que está desmontada ese tipo de acciones laborales que permitían reducir o eliminar beneficios a los trabajadores. Hoy esas medidas por parte de los empresarios o de personas que se aprovechaban de las condiciones laborales de los trabajadores para simplemente negar beneficios, fueron eliminadas de la legislación, fueron modificadas por la ley y es producto de lo que se ha venido haciendo con el Plan de Acción Laboral, que de una u otra forma ha traído beneficios al país y a los trabajadores
¿Cómo ha cambiado el tema de la tercerización laboral en la minería?
Aquí hay un tema muy largo y ancho y es la posición que mantienen las empresas. Ellas siguen asumiendo que el fundamento de las empresas es, de acuerdo a como lo determinen ellos y no al objeto social, o sea, desvían a veces el objeto social para justificar que algunas labores pueden ser tercerizadas o subcontratadas y es una lucha permanente. Nosotros hoy tenemos una gran discusión, en el caso específico del Cerrejón, por las labores de mantenimiento. Siempre hemos defendido en derecho que son labores esenciales. La empresa alega que solo los que trabajan en la operación de equipo son contratados directamente por la compañía y hacen parte del objeto social, nosotros tenemos como fundamento expresar que quien hace el mantenimiento y permite que ese equipo se mantenga bien y esté operativo permanentemente es el trabajador de mantenimiento y también es una labor esencial. Esa es la discusión. Nosotros venimos generando acciones contra eso. Hay muchas acciones legales frente a la tercerización laboral en la minería de carbón y más específicamente en las labores de mantenimiento que para nosotros siguen siendo labores esenciales.
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En los últimos 10 años, ¿cómo ha cambiado el tema de la discriminación sindical?
Uno siente que el empresario asume el respeto por las organizaciones sindicales, por el derecho de asociación, de negociación colectiva, pero uno ve, por lo menos en empresas tercerizadoras del Cerrejón, que casi que eliminan esa posibilidad de que el trabajador se asocie sindicalmente, que el trabajador presente pliegos de petición. Adicionalmente hay una política a raíz de la pandemia y es que las empresas, principalmente multinacionales se han aprovechado de las flexibilizaciones que, por vía de decreto gubernamental, ha generado el Gobierno Nacional. Los empresarios han impuesto sus posiciones con el fin de reducir beneficios laborales, en el Cerrejón enfrentamos una huelga de 91 días simplemente porque la Compañía quería eliminar beneficios de nuestra convención colectiva que no estaban en discusión y que estaban consagrados como un derecho constitucional y legal.
¿Cómo ha sido el cambio en términos de la negociación colectiva en los últimos 10 años? ¿Se ha incrementado?
Se sintió un incentivo por la negociación colectiva, pero a la par de eso, también se siente que se ha reducido el tema de la proyección de beneficios a los trabajadores. Los empresarios permiten que haya una negociación colectiva pero se enmarcan dentro de los que la legislación colombiana le permiten, por decir algo, si es un sindicato minoritario o si no tiene fuerza, simplemente se negocian 20 días de arreglo directo y como no pueden utilizar el derecho a la huelga por legislación colombiana, simplemente es: tiene esto que te estoy ofreciendo o ve a un tribunal de arbitramento, entonces casi que obligan a los trabajadores a firmar una convención colectiva con reducción de sus expectativas, desfavoreciendo al trabajador. Al final, lo que se puede notar o demarcar es que se firmó una convención colectiva pero el efecto en el beneficio a los trabajadores está en reducción o no están en la proyección que el trabajador aspira. El resultado final de las cifras puede mostrar un avance en el tema de la negociación colectiva, pero sigue habiendo muchos faltantes en ese aspecto, sin negar que se ha avanzado un poco.
¿Las condiciones de los trabajadores en la minería hoy son mejores que hace 10 años? ¿Hay mejores condiciones?
Si, es cierto y eso obedece, primero a la consolidación de organizaciones sindicales en el sector que hemos permitido avances significativos en el tema del manejo de los beneficios de los trabajadores. Ha sido posible mejorar las condiciones laborales de los trabajadores, pero por la fortaleza que ha habido en las organizaciones sindicales. Por eso nosotros hemos venido planteando la unidad del sector minero energético. Consideramos que la forma más contundente de poder lograr, solicitar, reivindicar y que los empresarios den beneficios a los trabajadores es mediante la lucha unificada para proyectar unas mejores condiciones laborales para las y los trabajadores. Definitivamente es la única alternativa que tenemos hoy los trabajadores en Colombia.
¿Qué le pediría a los congresistas de Estados Unidos con relación al cumplimiento del Plan de Acción Laboral?
Es bien importante que haya una solicitud formal de que el gobierno genere los espacios de equilibrio y de justicia social que permitan que el sindicalismo no sea estigmatizado como un enemigo de los empresarios y del pueblo. Los trabajadores que nos organizamos sindicalmente actuamos en derecho constitucional y legal, justificado en las normas laborales de Colombia, no puede ser estigmatizado la labor de un sindicalista y mucho menos puede ser perseguido y asesinado como se hace, eso es un reclamo que seguimos haciendo, porque se siguen asesinando líderes sindicales en el país sin ninguna acción contundente por parte del gobierno ni en la protección, ni en la seguridad de los sindicalistas. También debe haber una mejor legislación acorde con la necesidad de los trabajadores, por ejemplo, existe el convenio 176 de la OIT que tienen que ver con la higiene y la seguridad industrial en la minería que no ha sido ratificado por Colombia. Ese convenio es una mejor forma de aplicar estándares en la minería para beneficio social y en salud de los trabajadores, pero para el país no es vinculante porque no ha sido ratificado por el estado colombiano y ese tipo de medidas pueden ayudar a ser más vivible o más sostenible las labores en la minería.
Finalmente, veo dos oportunidades: exigirle al gobierno nacional que modifique su política laboral en el país y además que haya una política minero energética mucho más ajustada a la realidad y a los beneficios sociales y de país que se necesitan porque definitivamente aquí se agencian políticas mineras solo para favorecer a las multinacionales en vez de favorecer al pueblo y a las y los trabajadores.
*Los Centros de Atención Laboral es un proyecto implementado por la Escuela Nacional Sindical y financiado por el Departamento de Trabajo de los Estados Unidos (USDOL).