Peñalosa: el tecnócrata sin títulos

Imagen de referencia tomada de lafm.com

Enrique Peñalosa, quien es precandidato presidencial, recientemente estuvo en un evento de la Andi donde habló mal de los profesores y profesoras afiliadas a Fecode, esta es una respuesta a sus palabras.

Por Nelson Alarcón

En días pasados la Asociación Nacional de Empresarios de Colombia (ANDI), encabezada por su presidente Bruce Mc Master, invitó a los precandidatos presidenciales para que explicaran sus propuestas y programas de gobierno. Es un gesto necesario y urgente para un país con un grave proceso de desindustrialización que se ha dedicado en los últimos 20 años a la producción de materias primas, a operaciones del sector servicios y a la especulación financiera.

Uno de los candidatos presentes enfocó su presentación a defender la economía de mercado, la privatización de los derechos y, además, pronunció una diatriba contra los maestros y maestras de Colombia. Me refiero a Enrique Peñalosa, un empresario con ínfulas de político, un comerciante con aspiración de estadista y un tecnócrata sin títulos que ha puesto, en sus funciones como alcalde de Bogotá, a los derechos de los ciudadanos en último lugar. Con el recurso desesperado y trasnochado del adoctrinamiento, ofendió de manera abusiva a los y las docentes de Ciencias Sociales de Colombia, afirmando que: “demasiados de los maestros de las áreas sociales afiliados a FECODE llevan décadas adoctrinando a los niños en contra de todos los políticos, de todos los empresarios, de la empresa privada, de nuestro sistema político, de nuestra democracia, en fin”.

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Es decepcionante que un aspirante a presidente encuentre en los docentes un enemigo, y no aliados para resolver los problemas más apremiantes del país. Señor Peñalosa, los docentes de Ciencias Sociales merecen respeto, pues ellos abordan las contradicciones e injusticias que dominan nuestra sociedad, develan los límites del ordenamiento institucional, visibilizan las múltiples violencias que atraviesan a los colombianos y proponen ejercicios de memoria histórica para que se formen ciudadanos con sentido de justicia, solidaridad y en defensa de la soberanía nacional.  La historia, la geografía y los valores cívicos son sinónimos de libertad y pensamiento crítico, y no de sumisión o silencio.  

Las maestras y maestros de Ciencias Sociales trabajan día a día por consolidar una cultura de paz en la escuela que nos permita superar la violencia, promocionan los Derechos Humanos para lograr una convivencia pacífica y forman ciudadanos críticos para que cada joven en Colombia sea un símbolo de progreso nacional. Las Ciencias Sociales en Colombia son incomodas porque cuestionan, debaten y reflexionan sobre una realidad llena de desigualdad, injusticia y violencia que usted, aunque quiera, no puede ocultar con discursos cargados de lugares comunes y carentes de argumentación. 

Los colombianos, y principalmente los bogotanos, no pueden olvidar que Enrique Peñalosa como alcalde de Bogotá en dos ocasiones, convirtió la troncal más larga de Colombia (la Avenida Caracas) en el corredor de un sistema de buses que contamina el aire vergonzosamente, que produce hacinamiento (con 8 pasajeros por metro cuadrado), y que fracasó en la planeación urbana, al utilizar únicamente la superficie urbana como suelo para la movilidad. Los problemas sociales derivados de este sistema produjeron que en el 2016 Transmilenio fuera declarado el peor sistema de transporte para la seguridad de las mujeres. La inexistencia de un sistema de transporte público de calidad ubica a Bogotá como la ciudad con el peor tráfico vehicular a nivel mundial, según el traffic scorecard 2020. Pero estos temas poco le importan, ya que su lealtad y compromiso están endosados al Instituto de Políticas para el Transporte y el Desarrollo (ITDP), una institución privada que se encarga de promover el uso de buses por todo el mundo. Peñalosa ha sido presidente, consultor y lobista de dicha organización. 

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En materia educativa su actuar no ha sido distinto, ya que, en vez de fortalecer el sistema público de la ciudad, Peñalosa ha sido un defensor de las concesiones, y la tercerización de los procesos educativos. Es claro que los padres y madres de familia están en el derecho de escoger el tipo de colegio para la educación de sus hijos, tal como está consagrado en la Constitución Política. Pero es el deber de un gobernante garantizar con recursos públicos el derecho a la educación, en cuanto a acceso, calidad, permanencia y financiación. Durante la segunda alcaldía de Peñalosa (2016 – 2020), el Programa de Alimentación Escolar (PAE) se convirtió en un nicho de corrupción, siendo emblemática la contratación de empresas que cobraban 40 mil pesos por pechuga vendida, incumplió las promesas de nuevos colegios, cerró 15 mil cupos de preescolar que había garantizado la administración anterior y adoptó ciegamente los Derechos Básicos de Aprendizaje (DBA); un recetario prescriptivo emitido por los tecnócratas del Ministerio de Educación, que atenta contra la autonomía institucional y la investigación e innovación pedagógica.

Por su parte, el modelo de la educación concesionada (dinero e infraestructura pública operada por privados) impuesta y defendida por Peñalosa es un foco de reproducción de la desigualdad y la explotación laboral y su impacto en la calidad de la educación es insignificante. Este modelo que se basa en la fórmula de reducir costos y mejorar la calidad es un equívoco que desconoce la necesidad de reducir las brechas sociales mediante la universalización de los derechos fundamentales.   

No cabe duda que Enrique Peñalosa en vez de representar una alternativa para los colombianos, es la expresión de un político desesperado, vacío y sin ideas. Peñalosa es la representación de un modelo económico y político obsoleto que ve en los profesores de Colombia un enemigo; tal vez sea porque es un mal estudiante, tal vez por eso mintió sobre sus títulos para llegar al poder.  

Nelson Alarcón Suarez

Nelson Alarcón Suarez es profesor boyacense. Se desempeñó como Presidente de la Federación Colombiana de Educadores, Fecode y hace parte de la Junta Directiva de esta Federación.

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