¿Por qué se conmemora el 28 de julio? Día Nacional de la Salud en el Mundo del Trabajo

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Esta es la razón por la que se conmemora el 28 de julio como día de la salud en el mundo del trabajo en Colombia

Por Carmen Evelia Pico

Un 28 de julio, hace casi 40 años, ocurrió una de las peores tragedias para los trabajadores y trabajadoras colombianos: En 1983, por la imprevisión y las peligrosas condiciones, 123 trabajadores y trabajadoras nacionales y algunos técnicos extranjeros, perdieron la vida en los trabajos de construcción de los túneles de la represa de El Guavio. Tragedia que pudo haberse evitado.

Fue tal la catástrofe que el gobierno nacional declaró esta fecha como el Día Nacional de la Salud en el mundo del trabajo, como una manera de llamar la atención sobre las formas precarias y peligrosas con que trabajan diariamente más de 22 millones de colombianos y colombianas.

Este hecho y otros muchos sucesos como los actuales que vivimos a partir de la pandemia del Covid 19, pone sobre el tapete la importancia de la salud laboral, la protección y la mitigación de los riesgos en el trabajo y las condiciones de trabajo peligrosas y desgastantes de la población trabajadora.

La OIT en un informe difundido para el 28 de Abril de 2022, con ocasión de la celebración del Día mundial de la salud en el mundo del trabajo, declara que alrededor de 2,9 millones de trabajadores mueren cada año debido a accidentes y enfermedades laborales y al menos 402 millones de personas sufren lesiones ocupacionales o debidas al trabajo no mortales. Al examinar 41 factores de riesgo y resultados de salud específicos, las estimaciones conjuntas de la OMS y la OIT determinaron que las enfermedades laborales causan el 81% de todas las muertes relacionadas con el trabajo, en comparación con las muertes debidas a accidentes del trabajo, que representan el 19%. El factor de riesgo profesional al que se atribuye un mayor número de muertes es la exposición a largas jornadas de trabajo (que provocaron 745.000 muertes), seguido de la exposición a partículas, gases y humos, que provocó 450 000 muertes.

Colombia no es ajena a esta realidad, puesto que durante el primer trimestre de 2022 (enero-marzo) diariamente 1.238 trabajadores se accidentaron, muchos de ellos graves o mortales, con una tasa de accidentalidad del 0,99 por cada 100 trabajadores, se reconocieron que cada día 170 trabajadores y trabajadoras se enfermaron por causas relacionadas con el trabajo y se registraron 110 muertes por el trabajo en los tres meses, es decir, una muerte por cada 100 mil trabajadores y trabajadoras.

Pero la realidad se complejiza cuando se analiza la protección social en riesgos laborales, para marzo de 2022, Fasecolda, asociación que representa al gremio de las administradoras de riesgos laborales (ARL) reportó más de un millón de empresas afiliadas y 11.251.879 de trabajadores afiliados y afiliadas, de ellos el 90% son trabajadores y trabajadoras dependientes. Estas cifras nos demuestran que, de cada 10 trabajadores y trabajadoras, 5 de ellos y ellas están excluidos y no tienen protección en riesgos laborales, la tasa de cobertura ronda en el 52%. Las cotizaciones recaudadas por riesgos laborales en 2021 fueron de más de 4,6 billones de pesos, monto suficientemente robusto que supondría una mayor eficiencia en los programas de promoción y prevención en salud laboral.

Esta situación recrea un gran desafío para el movimiento sindical, para las políticas públicas y para la sociedad en su conjunto, para la recuperación de la crisis social y sanitaria agudizada actualmente de cara al período de transición política propiciada por el inicio de un nuevo gobierno alternativo, el cual cuenta, entre sus prioridades, la solución a estas crisis.

Creemos que este es un día NO para conmemorar o celebrar si no para “reflexionar” y “nunca olvidar”, para reiterar la urgente necesidad de que los(as) trabajadores(as) colombianos(as) no deleguemos en nadie la defensa de nuestro derecho a la salud y a la vida, y recordar que una verdadera garantía es una participación activa, consciente, capacitada e inteligente en defensa de estos derechos.

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