Fue un acuerdo “gana-gana”, dice presidente del sindicato
A las 10 de la noche de este martes, o sea dos horas antes de que terminara el plazo de ley para que los trabajadores del complejo minero de Cerromatoso iniciaran su anunciada huelga, la empresa y el sindicato de base, Sintracerromatoso, llegaron a un acuerdo que evitó el cese de actividades.
Un acuerdo que el presidente de Sintracerromatoso, Domingo Rafael Hernández, calificó como un “gana-gana”, dado que tanto la empresa como el sindicato cedieron en algunas de sus exigencias para así poder llegar a un arreglo, que a ambas partes dejó satisfechas.
Un factor que resultó clave para la solución de este conflicto laboral, fue la intervención que a última hora tuvieron los delgados del Ministerio de Trabajo enviados desde Bogotá para mediar entre las partes y evitar la huelga. Después de más de 6 horas de diálogo fructífero llegaron finalmente a un acuerdo final que, según Hernández, fue de buen recibo por parte de los trabajadores.
“A nosotros nos tocó ceder en lo del aumento salarial para poder lograr beneficios en otros temas. Fue en lo único que cedimos, porque logramos mantener todos los beneficios de la convención colectiva de trabajo, pese a que la empresa tenía la intención de desmejorar puntos en materia de salud, educación, primas extralegales y tablas de indemnización. Nada de eso logró”, explicó el presidente de Sintracerromatoso.
En asamblea realizada el 27 de mayo, casi por unanimidad los trabajadores se pronunciaron a favor de la huelga luego de agotadas las etapas de arreglo directo y la prórroga, sin ningún resultado. De los 394 asistentes a esa asamblea, 386 votaron sí a la huelga. Pero las partes siguieron negociando una posible salida, que felizmente se logró la noche del martes.
Cerro Matoso es una mina a cielo abierto de propiedad de la multinacional BHP Billiton. Está ubicada en Montelíbano, sur del departamento de Córdoba, y es una de las principales productoras de ferroníquel del mundo. Según el presidente del sindicato, en esta mina laboran 881 trabajadores, y de ellos 532 están afiliados al sindicato, por lo que éste es mayoritario.
En 2015 Cerro Matoso produjo 36.670 toneladas de ferroníquel, 11% menos que en 2014. Sus exportaciones totalizaron 429,7 millones de dólares, suma que según sus directivos fue muy inferior a la que se esperaba debido a la caída de los precios internacionales del níquel, circunstancia que tiene a la empresa en dificultades económicas.
El sindicato reconoce estas dificultades, pero no en la dimensión que las cuantifica la empresa. “Cuando los precios del níquel cayeron, el dólar estaba a $2.800, ahora está casi a 3 mil, y esa revaluación ha compensado la caída de los precios internacionales. La empresa no está ganando lo que quisiera, pero no está perdiendo. El costo de producción de la libra es de 3.7 dólares, y su precio en el mercado es de 4 dólares, hay pues un margen de ganancia. Además, Cerro Matoso produce un níquel limpio, de fácil extracción, es competitiva a nivel mundial”, afirmó Domingo Hernández.
Los puntos del acuerdo
La discusión final en la mesa de negociaciones se centró en dos temas: el incremento salarial, y las mejoras de las condiciones laborales de los trabajadores nuevos, los que hacen parte del régimen contractual establecido por la empresa en 2011. Estos trabajadores tienen beneficios significativamente menores que los antiguos.
En cuanto al aumento salarial, el sindicato inicialmente pedía un incremento del 9.77% para el primer año, o sea 3 puntos porcentuales por encima de la inflación causada en 2015. Esto para compensar la pérdida real del poder adquisitivo del salario, ya que de mayo de 2015 a esta parte de 2016 la inflación acumulada es 8.9%. Pero en aras de lograr el acuerdo con la empresa el sindicato aceptó que el incremento fuera 7% para el primer año, e IPC para los dos años siguientes.
Además, lograron incrementar el monto del bono que la empresa ofrece por firma de la convención; también que se creara un comité que estudie la implementación de la cotización para la pensión especial de vejez de los trabajadores expuestos a sustancias cancerígenas, como la sílice y el níquel metálico. El sindicato calcula que el 75% del personal que trabaja en la mina está expuesto a estas sustancias.
En cuanto a las reivindicaciones para el grupo de trabajadores del nuevo régimen, el sindicato logró para ellos, entre otros beneficios, una prima extralegal de vacaciones de 5 días adicionales; préstamos para vivienda por $55 millones por una única vez, amortizable en 10 años y con cero intereses; reajustes al programa de desarrollo, que es un artículo interno que da al trabajador la oportunidad de mejorar su salario mediante certificaciones; un auxilio de uniforme escolar, subsidio de servicios, y mantener los valores actuales de los demás auxilios, becas y comités paritarios.