El 23 de agosto el magisterio decidirá si va a paro nacional indefinido

—Dice Carlos A. Gruber, presidente de Fecode. Entrevista—

 El magisterio también se sumaría el torrente de la protesta social que viene sacudiendo al país. El próximo 23 de agosto la junta nacional de Fecode decidirá si va a un paro nacional indefinido como medida de presión al gobierno para que cumpla los compromisos que tiene pendiente con el magisterio. Así lo dijo Luis Alberto Gruber Ibarra, el nuevo presidente de Fecode.

Luis Alberto Gruber Ibarra

En entrevista para esta agencia de información, el señor Gluber Ibarra también se refiere a otros  tópicos de la coyuntura nacional y del magisterio, en especial al trascendental paso que Fecode ha dado para volverse federación sindical para todo el sector de la educación.

Habla asimismo de la agenda política y gremial de Fecode, de los decretos que darán vida jurídica a los acuerdos de negociación colectiva que recientemente esta federación firmó con el gobierno, y que éste se está demorando en expedir. Y habló, entre otros temas, de la posición de Fecode frente al gobierno Santos y a las negociaciones de paz en La Habana.                       

Gruber Ibarra, de 59 años de edad, es oriundo de la Costa Atlántica, y ya en el período pasado había integrado el ejecutivo de Fecode. Ahora repite como parte del grupo Progresistas, y en virtud a un acuerdo de gobernabilidad suscrito por este grupo con otras corrientes políticas que se expresan al interior de la federación: Marcha Patriótica, Partido Liberal, Colectivo Guillermo Marín, y un independiente, fue elegido presidente.

¿Sobre qué criterios se logró el acuerdo de gobernabilidad en Fecode dentro del nuevo comité ejecutivo?

Sobre la base de continuar la hoja de ruta institucional y las definiciones del último congreso nacional en Paipa. Es decir, la defensa de la educación pública como derecho fundamental, no como un servicio; un derecho que el Estado debe financiar completamente con educación de calidad, desde el preescolar hasta la universidad. Es decir la defensa de los intereses del magisterio y el fortalecimiento de la unidad gremial; y la inserción de la federación en los movimientos sociales del país. Por ejemplo, en la defensa de la educación pública y gratuita coincidimos con la Mane, y en ese sentido la apoyamos porque un victoria de la Mane es una victoria nuestra.

A propósito del Congreso de Paipa, éste acordó un cambio trascendental en  Fecode, que deja de ser solamente una federación sindical de maestros del sector público, para cobijar a todo el sector de la educación. Explíquenos cómo es eso.

Hubo un cambio de membrecía. Hoy Fecode es la Federación de Trabajadores de la Educación, en donde caben también los educadores de planteles privados,  profesores universitarios, instructores del Sena, madres comunitarias, y hasta los empleados de los colegios, secretarias, vigilantes, señoras del aseo. Ese es el mandato del Congreso de Paipa, y se corresponde con la línea que trazó el 5ª Congreso de la CUT para construir sindicatos de rama. Lo que queremos es que los maestros del sector privado, los profesores universitarios, no sigan siendo explotados, que su relación laboral tenga amparo gremial y el patrón no tenga las manos libres para hacer lo que quiera. La aspiración es que se convierta en una federación de unos 500 mil trabajadores, esa es la meta.

¿Por qué Fecode da este paso?

Porque si en el mundo globalizado los capitalistas se reúnen en grandes agremiaciones mundiales, entonces los trabajadores tenemos que hacer lo mismo. En toda parte: México, Chile, España, Canadá la consigna es la misma: no a la privatización de la educación, porque ésta es una política global. En Fecode estamos integrados internacionalmente con la AIE, y ésta agrupa a los sindicatos de educadores del mundo, y en países como Canadá y Argentina agrupa a todos los trabajadores del sector, que es lo que aspira a ser Fecode.

Por ejemplo en el caso de los profesores universitarios que están afiliados a la Aspu, ¿cómo sería la cosa?

Aspu desaparecería y entraría a ser parte de Fecode. A la última junta nacional asistieron representantes de Aspu, están convocados, y en este momento tienen voz. Cuando se cumpla el proceso de fusión también tendrán representación y voto en un comité directivo más amplio. Hoy Fecode tiene 15 ejecutivos, la proyección es que llegue a 20 o más.

¿Y cómo quedarán las estructuras departamentales?

 Adida, por ejemplo, que agremia a los educadores de Antioquia, integraría a la Aspu local, a los compañeros del Sena, a maestros de colegios privados, o que están en otras organizaciones. Es decir, tendría un mayor músculo social, y ya no será Adida sino la subdirectiva de Fecode en Antioquia. Y así en cada departamento.

Revisemos ahora algunos temas importantes para Fecode en lo gremial. En mayo terminó la negociación colectiva con el gobierno, y hubo algunos acuerdos que tienen que materializarse en decretos. ¿En qué va eso?

En eso se ha avanzado pero muy lentamente. Hay textos revisados en trámite de firma, para convertirse en decretos. En cuanto al tema de las primas de servicios, se nos presentó un texto de decreto, le hicimos unos reparos, se lo entregamos al ministerio y esperamos que hagan los ajustes. En el tema de derechos humanos, está pactado el texto del decreto, pero aún no se ha expedido. También está pactado lo de permisos sindicales, pero no se ha expedido. Lo que queremos es que haya más agilidad, porque son asuntos que requieren celeridad, no queremos que la paquidermia del gobierno se termine imponiendo.

La calidad del servicio de salud para el magisterio, es otro tema que Fecode  ha puesto en primer plano en estos últimos años. ¿Qué hay de eso?

Ese tema tiene dos ingredientes: en el papel tenemos un buen modelo de régimen de salud, pero en la realidad tenemos un mal servicio. Exigimos entonces que el gobierno haga cumplir a los prestadores de salud el pliego que firmaron, que asuman el tratamiento al magisterio con responsabilidad y con los recursos de la medicina moderna. También estamos en la pelea en el tema de riesgos profesionales. Le estamos aportando a la reglamentación de la Ley 1562 en lo relacionado específicamente con el magisterio, que no la tememos, queda al arbitrio y voluntad del médico laboral, con algunas excepciones.

La lucha por un Estatuto Único, ¿qué avances va teniendo?

 El escenario de discusión de ese tema es la comisión tripartita, en la que venimos avanzando. Esta semana casualmente hubo una reunión de esta comisión, en la que exigimos celeridad porque el Congreso de la República tiene unos tiempos, y esperamos que sea este congreso el que le dé trámite el proyecto de Estatuto Único para el magisterio.

En cuanto a los temas del país, ¿cuál es la posición institucional de Fecode frente a las negociaciones de paz que se adelantan en La Habana entre las Farc y el Gobierno?

 El magisterio es el gremio más victimizado del país. Son más de 900 los maestros asesinados en los últimos 10 años, más los amenazados, desplazados, extorsionados. Por eso queremos que el proceso de La Habana sea exitoso, porque si aquí se generan espacios de convivencia social, tendríamos mayor sosiego para la realización de nuestra actividad pedagógica y gremial. Además tenemos que prepararnos para el posconflicto, para asumir desde la escuela nuestro papel en la sociedad. Tenemos que estar preparados para asumir una propuesta que involucre a los niños y padres de familia en la construcción del tejido social que necesita y merece este país. Nosotros los maestros estamos en toda partes y podemos ayudar a construir un proceso político alterno, para que los problemas empiecen a resolverse.

¿Y frente al Gobierno Santos?

  Si yo soy Fecode y al presidente Santos lo encontrara en el desierto, y yo llevo una botella de agua, no le daría ni un trago, porque su gobierno es responsable del recorte de las transferencias a las regiones, del agotamiento económico para la educación, la salud y el agua potable. No somos amigos de la reelección de Santos, no es el poseedor de la solución de los problemas del país, ni los del magisterio; y tampoco caemos en el cuento de que es el menos malo. Él y Uribe son neoliberales, son responsables del desastre social del país, y hay que buscar salidas distintas.

 A todas esas, ¿cuál es la agenda de la movilización y la protesta de Fecode?

Ya estamos en eso. El primero de agosto hicimos una jornada, tendremos una junta nacional el 23 de agosto, y si a esa fecha no ha habido avances en la solución de los problemas del magisterio, definiremos la hora cero para un paro nacional indefinido. Si el viceministro del trabajo, José Noé Ríos, fue garante en la firma de los acuerdos, esperamos que ahora también lo sea para que se cumplan.

¿Y cómo está el músculo combativo del magisterio?

Yo creo que los maestros tenemos historia y tradición de lucha, y cuando nos tocan el corazón, cuando son asuntos que tienen que ver con los derechos humanos, la salud, las condiciones dignas de vida, no nos doblega nadie. Objetivamente tenemos muchas y valederas razones para irnos a un paro indefinido, también hacemos parte del torrente de la protesta social que sacude al país.

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