“El 2018 no pinta nada bien en materia laboral”, Julio R. Gómez, presidente de la CGT

Julio Roberto Gómez, presidente de la Confederación General del Trabajo, CGT, estima que este 2018 no será un año fácil en materia laboral. No pinta nada bien, dijo, considerando que seguirán pesando los problemas estructurales que minan el trabajo decente y el respeto a los derechos laborales de los trabajadores colombianos.

En entrevista con la Agencia de Información Laboral destacó como punto importante de la agenda de este año la realización del Décimo Congreso Nacional de esta central, en el mes de septiembre. Se refirió asimismo a la Comisión de Concertación y los hechos que rodearon el incremento del salario mínimo legal para el 2018, fijó criterios para la discusión de la reforma pensional, asunto que con seguridad estará en el debate nacional a partir del segundo semestre del año, entre otros temas:

¿Cómo la ve el 2018 en el campo laboral ?

Este 2018 no pinta nada bien. Continúa el proceso ascendente de los fenómenos de informalización de la economía y la tercerización laboral , contratos precarios de corta duración, y una larga lista de situaciones que hacen que los trabajadores tengan un mínimo de seguridad en términos de lo laboral , sin derecho a sindicalizarse.  Es muy difícil un contrato a término indefinido, todo se da por Outsourcing y empresas tercerizadoras, sin que medie la vigilancia del Estado. En materia de negociación colectiva, habrá que ver cuál será el comportamiento del sector empresarial, amén de los anuncios de una eventual reforma pensional que no tiene ninguna presentación.

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Es absurdo que el sector empresarial y la OCDE sigan insistiendo en una reforma que aumenta requisitos y disminuye beneficios para los pensionados, con el pretexto de que ahora la gente vive más que antes. Las nuevas generaciones tienen muy poca opción de pensionarse, porque les hacen contratos a 60 días, quedan desempleados un tiempo y luego otro contrato por 60 días, y así es imposible pensionarse. No es halagüeño el panorama. A pesar de que logramos un acuerdo del salario mínimo legal, que fue poco en pesos, pero de todas maneras 50% por encima de la inflación.

 A propósito de ese tema, ¿qué comentario le merece el hecho de que la CUT haya sido excluida del acuerdo que fijó el aumento salarial en diciembre pasado?

Yo estuve presente en la última reunión que días antes tuvimos en Compensar, y ante la pregunta de si concurrían las centrales a una reunión que se citara de manera informal, la CUT dijo que no concurriría. Es el gobierno el que tiene que dar le explicación porque fue el que invitó. El caso concreto es que la reunión con el Presidente el 30 de diciembre fue citada para una conversación informal, lo que ocurrió fue que a medida que avanzaba el tiempo y los temas se iban desarrollando, se llegó a la conclusión de que el gobierno estaba dispuesto a firmar con el 5.9%. Entonces la CGT, la CTC y la Confederación Democrática de Pensionados que estábamos allí dijimos: bueno, eso en número es poquito, como es poquito el 10% que pedía la CUT. Porque para que el salario medianamente alcance a comprar la canasta básica se debería incrementar el 100%; no se resuelve con el 10, el 20 o el 50 por ciento. Procuramos evitar que nos pasara lo de hace un año, cuando los empresarios estaban en la tónica del 7.7%, pero como no hubo acuerdo, el Gobierno terminó decretando arbitrariamente solo el 7%.  En este caso corríamos el riesgo de que el incremento no hubiera sido ni del 5.1% que ofrecían los empresarios, sino el aumento que quería el Ministro de Hacienda: el 4.5%.

Dicho en otros términos, ¿del ahogado el sombrero?

Exacto. Porque si uno hace una sumatoria de todo lo que nos han venido quitando por falta de concertación, hoy en día el salario mínimo sería distinto.

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¿Está en crisis la Comisión de Concertación?

La Comisión ha hecho aguas en torno a la fijación del salario mínimo legal. Pero sigue teniendo vigencia como espacio para la concertación y el diálogo social. Hay que discutir de manera pragmática si realmente es conveniente que nos sigamos desgastando en diciembre, o se opte por otra fecha para la discusión del aumento salarial. Este obedece a una ley, que tiene unos términos taxativos sobre el inicio y el plazo de la negociación, y sus mecanismos. Habría que modificarla. Somos partidarios que dialoguemos sobre ese tema en la mesa de concertación, con el concurso del sector empresarial y los colegas de las otras organizaciones sindicales.

 Usted mencionó la reforma pensional. ¿La CGT viene trabajando en alguna propuesta alternativa a la que han planteado el gobierno y los gremios?

La CGT está porque haya una reforma pensional, pero no para aumentar requisitos. Que al menos se mantengan las edades y el número de semanas cotizadas, como está en la actualidad. En una reforma pensional nosotros plantearíamos, por ejemplo, que los trabajadores que cumplan la edad, pero les falta semanas para pensionarse, tengan la posibilidad de acceder a un Fondo de Solidaridad Pensional, conformado con recursos del presupuesto nacional. Si a una persona le hace falta 300 semanas, por decir algo, el Fondo le preste para que cotice el número de semanas que le faltan, y de la misma mesada pensional le van descontando hasta cancelar la deuda. No estamos pidiendo que se le regale a nadie nada. Lo otro es que hay mucha gente que nunca cotizó, porque estaba en la economía informal o laborando en el campo, pero que no se puede dejar en la desprotección total. Se vería cómo con recursos del Fondo se acompañan estas personas, sino con una pensión completa, sí con un subsidio que les permita enfrentar la vejez en una situación de más dignidad.

También la reforma debe establecer que los aportes a la salud de los pensionados no sea del 12% sino del 4%. En algunos países los pensionados no tienen que aportar nada a la salud porque se supone que durante su vida laboral cotizaron para construir una pensión de jubilación con ese derecho. Es mucho lo que hay que discutir, pero si lo que se quiere es aumentar más la edad y poner más requisitos, no estamos de acuerdo con ninguna reforma pensional en esa dirección.

La larga huelga de Avianca puso el dedo en la llaga del derecho de huelga en Colombia. ¿La defensa de este derecho estará este año en la agenda?

 En Colombia han venido enterrando el derecho de huelga. Es un artículo exótico. Lo de Avianca fue atípico porque estaba en huelga, pero los aviones seguían volando. En términos prácticos fue un acto heroico de los compañeros de Acdac, que se mantuvieron en el cese. Pero fue sumamente compleja la forma como se afectó el derecho de huelga y el Gobierno Nacional no ofreció garantías para ese ejercicio. El derecho de huelga sigue siendo un tema de debate en la OIT, donde hay que defender que prevalezca y se respete como corresponde.

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Sobre la agenda de la CGT este año 2018 qué nos puede decir.

 Este año estamos en modo Congreso. Entre el 11 y el 14 de septiembre realizaremos el Décimo Congreso Nacional de la CGT, en una fecha emblemática para el movimiento sindical: el aniversario número 41 del paro cívico nacional de 1977.  Ese día 14 estaremos clausurando el Congreso. Vamos a tener la presencia de unos 1.500 delegados procedentes de todo el país y de diferentes sectores de la economía y del aparato productivo. Habrá presencia del sindicalismo internacional, a instancias de la Alternativa Democrática Sindical, y de organizaciones de otros continentes.

¿Cuáles serán los temas centrales del Décimo Congreso?

Trabajaremos en torno a 16 ejes temáticos, que van desde el modelo alternativo de desarrollo, hasta temas de la formalización laboral, agenda OIT, trabajo decente, etc. Y culminará con la elección del nuevo Comité Ejecutivo de la CGT, conformado por 70 miembros: 45 titulares y 25 suplentes. Los 45 titulares definirán la distribución de los cargos directivos.

 ¿Qué más hay en la agenda laboral ?

 Seguiremos actuando a instancias del Comando Nacional Unitario, donde estamos todas las centrales sindicales congregadas, independientemente de cualquier situación y diferencia que pueda haber entre nosotros. Porque la CGT no ha peleado con las otras centrales, ni nuestro ánimo es pelear con ellas. También estaremos en los preparativos de la conmemoración del 1° de Mayo y las demás actividades.

 Este es un año electoral. Todo el primer semestre estará en modo elecciones para el Congreso y Presidencia. ¿Cuál es la directiva de la CGT a sus bases para estas elecciones?

La CGT, hasta el día de hoy, no tiene ningún candidato. Estamos porque haya una votación masiva en estas elecciones; y adelantaremos una campaña para que nadie venda el voto, porque es tan corrupto el que compra el voto como quien lo vende. Le estamos diciendo a la gente que vote a conciencia, no bajo presión o intimidación; que vote por el candidato o candidata que considere pertinente, y si no está seguro, vote en blanco.

 ¿Y para la segunda vuelta?

Amanecerá y veremos. Hasta el momento no hemos tomado ninguna decisión en ese sentido.