Se vienen pagando las bonificaciones, pero la atención en salud sigue en crisis
El Ministerio de Hacienda se niega a pagar deudas al magisterio
Los maestros participarán este jueves en la protesta contra el Gobierno
A pocas semanas de cumplirse un año del acuerdo que el 7 de mayo de 2015 puso fin al paro que por cerca de dos semanas adelantó el magisterio colombiano, aún hay puntos importantes que el Gobierno no ha resuelto.
El punto sobre nivelaciones salariales se está cumpliendo. El 31 de diciembre el Gobierno emitió el decreto 2565 que reconoce bonificación del 10% y el 15% para los maestros del grado 14, lo mismo que la bonificación para los maestros del estatuto 1278 de grado 12 con maestría y doctorado. También dio vía libre a los recursos para los juegos deportivos del magisterio que se realizarán en octubre, y en cuya organización Fecode viene avanzando en asocio con el Ministerio de Educación y Coldeportes.
Otro punto que se viene cumpliendo, pero con dificultades, es el de la evaluación diagnóstica formativa de los maestros, a la que, según Fecode, el gobierno ha intentado ponerle “palos en la rueda”.
Temas en los que no se ha avanzado, y son fundamentales para los maestros, son los relativos a la mejora del servicio especial de salud de los maestros y el pago de las deudas a éstos por concepto de horas extras, primas, ascensos, etc. El Ministerio de Hacienda se niega a cancelar estas deudas.
También está en veremos la jornada escolar única que el Ministerio de Educación viene tratando de implementar. Pero no porque Fecode y el magisterio se opongan a la jornada única, sino porque el gobierno no ha creado la infraestructura ni aportado los medios para que ésta sea funcional y útil. Hay mucha improvisación.
Sobre todos estos temas la Agencia de Información Laboral dialogó con Rafael Cuello Ramírez, secretario general de Fecode, quien también se refiere a la participación que el magisterio tendrá en la jornada de protesta nacional este jueves 17 de marzo, y a las acciones que se está preparando para apoyar los acuerdos de paz en La Habana y su refrendación.
- ¿Cómo va el proceso de evaluación diagnóstica formativa que Fecode acordó con el gobierno?
El Decreto 1278 del 2001 impuso la evaluación por competencia amarrada a la disponibilidad presupuestal. Eso lo derrotamos en el acta de acuerdo de mayo. Lo reemplazamos por una avaluación diagnóstica formativa, fundamentada en lo que corresponde a la actividad pedagógica del maestro, que es la clase. El maestro hace un video de su clase con unos parámetros establecidos y se seleccionan unos pares académicos que califican su práctica con base en el video, y determinan si cumplecon los requerimientos, caso en el cual asciende en el escalafón y se reubica. Si no lo aprueba debe realizar un curso en las áreas en las que está flojo. Ese proceso evaluativo ha venido avanzando, pero con muchas trabas, bien por situaciones de casuística que dificultan la puesta de los videos en la plataforma del ICFES, o porque el gobierno trata de desvirtuar lo que está en el acta de acuerdo. Por ejemplo, quiere que los pares codifiquen los videos, y ellos no son codificadores. Hemos logrado que el Ministerio recoja las opiniones que sobre ese particular ha construido Fecode, para que el proceso redunde no solo en el bienestar de los maestros sino de la población.
- El tema de la atención en salud sigue siendo otro cuello de botella. Fecode lleva años reclamando para que se resuelve, pero no se resuelve. ¿Por qué?
Los maestros tenemos un régimen especial de salud y un régimen prestacional excepcional. El Gobierno certificó que ninguno se va a tocar. Lo que está en discusión es el modelo de contratación que existe para el tema de la salud, que es perverso. Los contratistas se dan el lujo de incumplir los contratos como le da la gana, hacen ochas y panchas con la salud del magisterio porque no hay cómo sancionarlos. Lo máximo es una multa 0.5% de la capital, que es como arrancarle un pelo a un gato. Queremos cambiar ese modelo de contratación, que los contratos con los prestadores incluyan herramientas que impidan que éstos incumplan como lo han hecho hasta hoy, y ponerles la vigilancia de la Procuraduría, Contraloría, Fiscalía y la Superintendencia de Salud. Porque nosotros pagamos esa salud con el 8.5% de nuestro salario. Con el Ministerio de Educación ya se aprobó una línea de contratación fundamentada en los principios de la Ley 80 y todas las normas de contratación. Ha dicho que no está de acuerdo con la prórroga de esos contratos y se comprometió a hacer los ajustes que garanticen un servicio de salud digno para el magisterio y sus familias. Veremos qué pasa, porque aún no se ha diseñado el nuevo pliego de condiciones.
- ¿Y qué hay sobre los dineros que el Gobierno les debe a los maestros?
Es un punto sensible porque afecta la economía del docente y su salario. El Ministerio de Educación viene cumpliendo con ese tema, certifica las deudas por concepto de horas extras, primas extralegales, ascensos, zonas rurales de difícil acceso, etc. Las envía al Ministerio de Hacienda, pero allá hay una funcionaria que todo lo que llega del Min-Educación lo devuelve. Eso ha dificultado los pagos.
- Hace un año ustedes rajaban el desempeño de la ministra Gina Parody. ¿Cómo la califican hoy?
Se sigue rajando. La Ministra Parody ha cogido a la educación como una mercancía y una oportunidad de negocios. Lo vemos en el caso del plan de alimentación escolar. Han hecho una perorata con lo de la alimentación de los niños de La Guajira, donde todo el mundo sabe quién se roba la plata, pero no pasa nada. Lo mismo hace el Instituto de Bienestar Familiar, y tampoco pasa nada. Cómo es posible que el Ministerio de Educación tenga más de 16 programas que no fueron concertados con el magisterio, programas que así no pueden funcionar, se lo hemos dicho a la Ministra, pero no nos atiende. Es el caso de la jornada única. Fecode está de acuerdo con esta jornada, de hecho desde 1994, cuando se emitió la Ley 115, venimos diciendo que para avanzar en calidad educativa es necesaria la jornada única. Pero para qué esta funcione es necesario dotar de los colegios de infraestructura moderna, mobiliario, transporte, alimentación, maestros bien pagados y calificados. Y de eso no hay nada, es un discurso. En diciembre el Ministerio expidió el Decreto 2568, por el cual los rectores se les bonifica el 10% por cada jornada que asistan. Si tienen 3 jornadas reciben 30% de bonificación. Pero se las rebajaron al 25%, y eso los desestimula. Los rectores se están retirando de la propuesta en vista de los incumplimientos.
- ¿Cómo analiza el desempeño en materia educativa del alcalde Peñalosa?
La Secretaria de Educación, María Victoria Angulo, viene de ser directora de la ONG Empresarios para la Educación, ahí se formó. Ha llegado entonces a fortalecer el proyecto de colegios en concesión, al que Fecode se opone. Pero no porque sean malos, sino por el negocio que involucran. El alcalde de Bogotá construye un megacolegio para 3 mil alumnos, con todo toda la tecnología de punta, y se lo entrega en concesión a un particular, y además le paga por los 3 mil alumnos. Un negocio redondo. Lo que decimos es que los colegios los debe administrar el Estado, ¿por qué tiene que ser una oportunidad de negocio? El alcalde Peñalosa ha decidido avanzar en la privatización, eso da votos y coimas. Ante eso nos toca poner toda nuestra capacidad de movilización para enfrentar las políticas privatizadoras, que afecten a la educación y a los educadores.
- Hablemos del Proceso de paz. ¿En qué está Fecode con ese tema?
Los colombianos debemos ver con satisfacción que el proceso de paz con las FARC avance, y aspiramos a que también se haga con el ELN y lo que queda del EPL. Planteamos la necesidad de apoyar ese proceso y el mecanismo de refrendación que se acuerde; trabajar con la comunidad educativa sobre el tema de la paz, por qué hablamos de ella y cuál es la memoria histórica. Debe haber un redimensionamiento de la situación de la escuela como territorio de paz. En el futuro nos vamos a encontrar en las aulas con hijos de padres ex-FARC, ex-ELN, ex-AUC, ex-Bacrim, y eso nos va a tocar afrontarlo a los maestros. Necesitamos comenzar a hacer un trabajo de sensibilización con los 334 mil maestros del país, para que los imaginarios sobre la paz se resignifiquen y los acuerdos sean conocidos y manejados por todos los ciudadanos. Fecode está trabajando en unos lemas, afiches, cartillas, textos dirigidos a los padres de familia y los estudiantes. Para ello programaremos seminarios y utilizamos los programas de televisión y de radio institucionales de Fecode. También hacemos parte de la campaña “La paz es una nota”, que lidera la presidencia de la república y la Organización de Estados Iberoamericanos con las universidades Nacional, Javeriana, Pedagógica y algunas ONG que están por la paz.
- Y en el paro nacional de mañana 17 de marzo, ¿cómo va Fecode?
El 19 de febrero la Junta Nacional decidió vincularse al paro convocado por las centrales sindicales y el Comando Nacional Unitario. No vamos a hacer paro de 24 horas, sino a vincularnos a las movilizaciones y marchas en todas las capitales de departamento. En la jornada de la mañana habrá clases las 3 primeras horas, porque a las 10 los maestros saldrán a las calles a manifestarse. Los de la jornada de la tarde se vincularán a las actividades de la mañana y entran a clases a las 3. Habrá pues anormalidad académica, pero no paro.
- ¿Qué planes tiene Fecode en la agenda de este año?
Terminar la evaluación diagnóstica formativo, obtener el pago de las deudas represadas, reactivar la Comisión Tripartita que con base en el acta de acuerdo del 7 de mayo debe consensuar el nuevo Estatuto Único de la Profesión Docente, y realizar el Congreso Pedagógico Nacional en octubre. Este es un evento para reflexionar y discutir sobre la política educativa y el modelo pedagógico que requiere el país, pensando en una reforma de fondo que sea discutida en el Congreso de la República, en la que todos debemos opinar y formular propuestas.
- Finalmente, ¿cuál es su mensaje a los educadores?
Que es necesario organizarnos para presionar al gobierno a cumplir los compromisos pactados con Fecode. Nos hemos declarado en estado de alerta por lo del servicio de salud que no se ha resuelto, por las deudas que no nos pagan, pero también porque se avecinan las reformas tributaria y pensional; por el desgobierno y la corrupción que nos carcome, por el apagón que se nos viene. Es absurdo que un país con un nivel importante de desarrollo tenga un apagón, más cuando ya pagamos por la garantía de seguridad energética, plata que se feriaron.