272 mil firmas válidas son necesarias para que la Registraduría Distrital de Bogotá convoque a elecciones revocatorias del mandato de Enrique Peñalosa como alcalde de Bogotá, una cantidad que el comité “Unidos Revocamos a Peñalosa” espera recolectar, e incluso duplicar, durante los próximos tres meses.
Así lo aseguraron –en rueda de prensa realizada esta semana en el Concejo de Bogotá– voceros del mencionado Comité, del cual hacen parte 62 organizaciones sociales, políticas y sindicales, y un grupo importante de ciudadanos, asociaciones comunales, ambientalistas, estudiantes, animalistas, vendedores ambulantes, recicladores, entre otros, todos comprometidos en sacar adelante la revocatoria del mandato el Alcalde Peñalosa por considerar que sus políticas están teniendo un impacto negativo para la ciudad y amplios sectores de la ciudadanía y del mundo del trabajo.
“Consideramos importante que los sindicalistas juguemos un rol trascendental en la denuncia de la política del alcalde Peñalosa, en la recolección de firmas y después en el proceso electoral para revocar su mandato”, señaló Francisco Maltés, integrante del Comité Ejecutivo de la CUT Nacional y miembro activo del Comité “Unidos Revocamos a Peñalosa”, el cual desde el 14 de enero cuenta con el aval de la Registraduría Distrital para la recolección de las firmas.
Entre las organizaciones sindicales distritales comprometidas con la campaña revocatoria están Sindistritales, Sintrateléfonos, Sintraelecol, la ADE, Sunet, los sindicatos de la salud, entre otros, en su mayoría de la CUT. “Aunque también hay sindicatos de la CTC y la CGT, así está última como central sindical no esté apoyando el proceso”, señaló Francisco Maltés.
La estrategia se ha planteado por localidades, las 20 que tiene Bogotá, donde avanza la consolidación de los comités territoriales de la campaña y las jornadas de recolección de firmas casa a casa y en sitios de concentración masiva. Cada sindicato deberá tener un comité de revocatoria y organizar la distribución y recepción de los formularios, y articular en cada localidad a trabajadores con las comunidades, agregó Maltés.
El Comité ‘Unidos Revocamos a Peñalosa’ no es el único en la tarea. También está el Comité “Revocamos a Peñalosa”, que sigue las orientaciones del exalcalde de Bogotá, Gustavo Petro. Esta semana continuaron los contactos entre los voceros y promotores de ambos comités con el objetivo de consolidar uno solo, que garantice el éxito de la iniciativa y la recolección de las firmas en un solo formato.
Como procede la revocatoria
El artículo 103 de la Constitución Política, reglamentado con la Ley 1757 de 2015, prevé los mecanismos de revocatoria del mandato de un gobernante; tarea difícil si se tiene en cuenta que en los 25 años que lleva la norma ha habido 166 intentos fallidos de revocatoria, ni un solo caso exitoso.
Según la norma, se debe recoger una cantidad de firmas equivalentes al 30% de los 906.058 votos con los que fue elegido Peñalosa, es decir unas 272 mil firmas, para lo cual hay un plazo de seis meses. Sin embargo, los líderes de la campaña esperan recoger por lo menos 350 mil firmas en tres meses, para así tener un buen colchón de respaldo a las firmas que resulten nulas. Una vez revisadas y avaladas las firmas, la Registraduría convocará al referendo revocatorio, en el cual los votantes solo pueden decir SÍ o NO a la permanencia del alcalde Peñalosa en el cargo.
La votación deberá superar el umbral del 40% del total de los votos válidos emitidos en la elección para la Alcaldía de Bogotá en octubre de 2015, que fue de 2’730.572 votos. Es decir, el umbral es de 1’092.300 votos. La opción que obtenga al menos el 50%, más un voto, gana el referendo. Es decir, para revocar el mandato de Enrique Peñalosa se requerirá que la votación supere el umbral y que al menos 550.000 bogotanos voten SÍ.
Razones para la revocatoria
El mandatario capitalino cerró el año con una de las peores imágenes que gobernante alguno de Bogotá haya acumulado en tan poco tiempo. La última encuesta de “Bogotá cómo vamos” sobre percepción ciudadana, reporta una imagen general desfavorable del 78%; y en las capas populares su imagen desfavorable sube hasta el 86%, casi igual a la que tuvo Samuel Moreno (89%) en la última etapa de su gobierno, cuando ya hervía en los medios y en la Fiscalía General el multimillonario robo conocido como “El carrusel de la contratación”.
Según Francisco Maltés, durante la campaña electoral Peñalosa no dijo toda la verdad sobre sus propósitos, les mintió a los ciudadanos, y los problemas se han agravado. Al respecto señaló:
“Nunca dijo que iba a intervenir la reserva Van Der Hammen, ni que pensaba privatizar la ETB, y el Concejo se la aprobó sin un estudio técnico que lo justificara. No dijo nada sobre cambios en la construcción el metro, y en reiteradas ocasiones se comprometió a no despedir empleados del Distrito, y resulta que ya ha despedido unos 30 mil. Transmilenio sigue siendo un caos absoluto, atiborrado e inseguro; el problema de la salud también lo ha manejado mal, el hacinamiento está peor. El Secretario de Salud dijo que no se iban a cerrar puntos de atención, y se han cerrados 10. La tercerización laboral en los hospitales distritales llega al 80%, y en la mayoría de entidades es del 70%. Y a eso se suman las mentiras sobre sus títulos académicos”.
Maltés también se refirió al tema de ocupación que la economía informal hace del espacio público, una forma que tienen las personas de rebuscarse la vida frente a tanto desempleo. “Creemos que el espacio público se debe compartir entre vendedores, que son trabajadores, y los ciudadanos que usamos el espacio. El problema no se resuelve desalojando a los venteros”, anotó.
Asimismo, recalcó que, por primera vez en muchos años el Consejo Territorial de Planeación, entidad integrada por sectores sociales, gubernamentales y empresariales, no aprobó el Plan de Desarrollo del Distrito. Es decir, desconoció la participación ciudadana.
“Todo el establecimiento se ha unido para defender a Peñalosa: el Gobierno Nacional, los partidos políticos tradicionales, empresarios, medios de comunicación, el concejo de Bogotá, que está enmermelado. Pero ninguno dice nada sobre el fracaso de esta administración, ni qué cosas positivas ha hecho. Lo que dicen es que es un buen alcalde y hay que darle compás de espera. Eso es lo lamentable”, afirmó Maltés.
Por su parte Edilberto Centeno, activista del sindicato Sunet y delegado del Polo Democrático en la coordinación de la campaña, coincidió con la anterior apreciación. “Hay una gran insatisfacción de la ciudadanía, que se ha expresado en movilizaciones y en la caída de la aceptación del Alcalde Peñalosa en las encuestas. En la protesta han confluido sectores sociales que antes no se encontraban, los ha unido Peñalosa”, dijo.
Indicó que, aparte de las organizaciones sindicales, a favor de la revocatoria de Peñalosa están también los ambientalistas, por la arremetida contra la estructura ecológica de los cerros orientales y la reserva Van Der Hammen; sectores comunales de las distintas localidades de Bogotá, por la reducción presupuestal en programas sociales. Otro importante sector que Peñalosa tiene en contra son los estudiantes universitarios y sectores de la economía informal, que se han visto desalojados del espacio público.
También Abel Amado, directivo de Sintrateléfonos, se refirió a la especial coyuntura que se presenta en Bogotá y a la eventual revocatoria del alcalde Peñalosa: “Estamos unidos para revocar el mandato de este señor y ofrecer una mejor calidad de vida para los trabajadores y ciudadanos de la capital. Hay un común acuerdo sobre la necesidad de esta revocatoria, con una amplia exposición de motivos para ello”, señaló.
Este jueves el Comité ‘Unidos Revocamos a Peñalosa’ se volvió a reunir en la sede de Sintrateléfonos para seguir avanzando en campaña y precisar la participación logística humana y económica de cada organización en concreto.